Un terremoto de 7,6 grados de magnitud estremeció el mar Caribe frente a Islas Caimán y conllevó a ese y otros territorios con costas en el mencionado espacio marítimo a emitir alertas por tsunamis.
El temblor ocurrió a las 18:23 hora local; los servicios sismológicos inicialmente hablaron de 8,0 grados de magnitud en la escala abierta de Ritcher, luego degradaron la intensidad del fenómeno y ubicaron su epicentro a 205 kilómetros al suroeste de la isla de Gran Caimán.
Las autoridades de ese territorio recomendaron a los residentes de las zonas costeras a buscar refugio tierra adentro y mantenerse informada por todas las vías de comunicación, pues se teme que se registre un maremoto.
Además, naciones como Colombia, Haití, Aruba, Belice, Costa Rica, Bahamas, Cuba, Panamá, República Dominicana y Honduras también quedaron bajo alerta, pues la intensidad del sismo y su ubicación en aguas profundas podrían generar olas de gran altura, afectando zonas costeras en la región.
Los reportes de perceptibilidad se han dado en varias provincias de Cuba, como La Habana, Mayabeque y Pinar del Río, según el especialista Gilberto Sánchez del Centro Nacional de Investigaciones Sismológicas de Cuba, CENAIS.
Usuarios en redes sociales informan haber sentido la sacudida también en Isla de la Juventud, Matanzas y Cienfuegos.
Dada las características de la zona de incidencia, no hay peligro ni probabilidad de ocurrencia de tsunami.
«La alerta de Tsunami se dispara cuando hay ocurrencias de sismos de grandes magnitud, producto del peligro inminente que constituyen, pero dado que no sobrepasa ni llega a los 8 grados y se generó en una zona distante, no hay peligro ni probabilidad de ocurrencia de tsunami», aclaró Arango Arias, desde el Centro Nacional de Investigaciones Sismológicas de Cuba.