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La designación de Alaín Álvarez al frente del equipo Cuba sub 23 que participará en la IV Copa Mundial, a comenzar el venidero mes de octubre en Taiwan, fue una grata sorpresa y un premio a un hombre que se ha entregado siempre al béisbol.
“Desde mis tiempos de deportista activo siempre fue mi sueño convertirme en un profesional de este deporte. Me gustaba mucho jugarlo, pero me veía con alguna proyección en la parte técnica, pero jamás con el perfil de director”, le confesó a Cubadebate esta mañana de viernes en el estadio Latinoamericano, en uno de los entrenamientos de la preselección.
“La parte que más me gustaba era la preparación de los equipos, ya sea en el orden físico o en el técnico-táctico, pero siempre estuvieron buscando la manera de cambiarme el perfil hacia la dirección, porque veían algo en mi persona”, agrega.
Así, hace ocho años, tomó las riendas del equipo Cienfuegos sub 23 con muy buenos resultados. Durante su secuencia de trabajo en esa categoría, llegó a conformar un equipo competitivo, al punto de lograr la clasificación en la Serie Nacional 60, una vez que fue elegido para dirigir el equipo grande de la provincia.
“Creo que por eso han confiado en mí para esta tarea, por mis resultados anteriores. Este año por muchas razones que todos conocen, se desmanteló el equipo, y aunque no son justificaciones, no nos dio tiempo agrupar un colectivo competitivo. Tuvimos varias lagunas y no pudimos lograr los resultados”, declaró.
El cienfueguero, quien se define a sí mismo como una persona tranquila y organizada, cree que esas características de su personalidad lo han ayudado mucho para poder avanzar un poco profesionalmente.
“Como director he tenido que hacer algunos ajustes. Uno inicia con una línea, con una forma, pero va aprendiendo de otros, va tomando experiencias, y va modificando su estilo de dirección, pero ahora me veo como un director un poco más pausado, más analítico, confío mucho en la sabermetría, y escucho mucho a los que me rodean, aunque al final tenga que tomar yo las decisiones”, reconoció.
Aunque nunca ha dirigido una selección nacional en ninguna categoría, Álvarez ha acumulado varias experiencias, la más productiva de ellas cuando acompañó a Armando Johnson en el banquillo en el pasado campeonato panamericano, donde se obtuvo el boleto mundialista y se alcanzó una medalla de plata.
“He tenido varias experiencias. En un primer momento formé parte para los juegos de Cali de un grupo multidisciplinario que se reunió aquí con atletas de renombre y muy buenos técnicos, también trabajé con la dirección de Eriel Sánchez y el grupo de acción, y por último al lado de Mandy”, dijo.
“Él es una persona muy conocedora, un sabio del béisbol, aboga mucho por la disciplina, muy paciente con los muchachos. Esas experiencias vividas al lado de un manager que lleva tanto tiempo en series nacionales y con resultados, nutre mucho a uno. Todo esto es un compendio para poder tomar una línea y tener un mejor comportamiento a la hora de dirigir un equipo como este”, aseguró el estratega.
Por todo esto Alaín Álvarez no se sorprendió cuando la Comisión Nacional se decantó por él para asumir este reto. Su conocimiento de las características del grupo y su hoja de servicios, eran un aval más que suficiente para esa elección.
“Es un compromiso muy grande porque vamos a enfrentar un campeonato mundial. Hay un buen grupo de muchachos reunidos aquí, con un excelente cuerpo técnico, y pensamos lograr los objetivos”, se limitó a decir.
Con relación a las posibilidades del equipo y al estudio de los conjuntos que allí estarán, el nuevo director expresó:
“Nosotros debemos en breve comenzar con un proceso de scouting. Tenemos que esperar por los roster de los otros equipos, porque sabemos que tienen atletas contratados y tenemos que saber si van a estar presentes, para hacer un trabajo un poquito más preciso, pero el deseo siempre es ganar y acabar de darle un alegrón al país que es la medalla de oro.
“Vamos con la idea de una medalla, y entonces ya veremos en el transcurso de los días lo que nos da la competencia. Pero siempre los muchachos tendrán presentes que el camino es largo y hay que llegar hasta el final, y que allí se decida lo que sea”.
Según nos aseguró, el arma fundamental del elenco antillano está en su cuerpo de lanzadores, de acuerdo a como ha venido comportándose en los últimos años. La defensa es otro punto fuerte, y están tratando de hacer un equipo un poco más ofensivo que sea capaz de fabricar un poco más de carreras, para que los marcadores sean más holgados, que es donde han tenido últimamente las mayores deficiencias.
Ante la interrogante de cuánto puede cambiar el equipo con la entrada de varios atletas nuevos a la preselección que tuvieron destaque en el recién finalizado torneo nacional, Álvarez nos dijo:
“La base del equipo ya está. Hay otros atletas que tuvieron un buen rendimiento en el campeonato nacional, sobre todo en temas ofensivos que es lo que estamos buscando. Hemos incorporado algunos que tienen muy buen somatotipo, pero el grupo no debe diferir mucho de lo que se ha visto durante todo el ciclo, aunque llevaremos a la competencia los que estén en mejor forma.
“Sabemos que nos vamos a enfrentar a usos horarios diferentes, es un cambio muy brusco que lleva un poder de adaptación muy grande, y será más fácil para los atletas que ya han tenido esas experiencias”.
Por último, el nuevo director, nos dijo en exclusiva quién será el capitán de esta escuadra para el magno evento de la categoría.
“Aquí hay un grupo de atletas que repiten y están los que por sí solos se decantan y tienen cualidades de dirección, son líderes, y los propios muchachos que son los que deciden, al final escogen su propio capitán.
“Debía ser uno de los atletas más experimentados, que aglutine, que sea disciplinado, y que nosotros podamos contar con él. Te puedo decir que es Andry Pérez, es receptor además, que dentro del juego lleva gran responsabilidad”, confesó.
Cuba solo ha participado en la tercera versión del campeonato mundial de la categoría, desarrollada el año pasado en las ciudades de Obregón y Hermosillo, donde alcanzaron un meritorio cuarto lugar, después de sufrir el abandono de varios de sus atletas.
Japón, México, y Venezuela son los campeones de las ediciones anteriores.
(Entrevista de Boris Luis Cabrera Acosta)
