A pocos días del cumpleaños 99 de Fidel Castro, el 13 de agosto, el sistema de instituciones de la cultura exhibe un amplio programa para honrar el legado del líder histórico de la Revolución cubana.
Conversatorios, exposiciones y presentaciones de libros son pequeñas muestras del afecto de un pueblo hacia su figura, pues el mayor homenaje es el agradecimiento eterno de quienes reconocen en su obra un faro de luz, un ejemplo de modestia, desinterés, altruismo, solidaridad y heroísmo.
El Centro Fidel Castro Ruz, cuya misión es la de estudiar y preservar la obra y el pensamiento del Comandante en Jefe, se suma a la celebración con sus habituales recorridos por la entidad, también con otras iniciativas para niños y adultos.
La institución dispone de una tecnología de avanzada para acercar al visitante al legado de Fidel. Nueve salas permiten descubrir a un hombre extraordinario, su excepcional oratoria, la solidaridad con los pueblos del mundo y la humildad que lo caracterizó a lo largo de su vida.
En el año de su centenario, múltiples también son las actividades que lo honrarán; si bien la tarea más importante desde la fundación del centro es la conformación de las Obras Escogidas de Fidel Castro.
La Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac) también se hizo eco de la fecha y reservó el espacio La Tertulia, el miércoles próximo, con la presencia del intelectual y presidente de Casa de las Américas, Abel Prieto, y del abogado, historiador y ensayista Ernesto Limia.
En tanto, el Memorial José Martí acogerá este lunes la inauguración de la exposición personal «Toda la gloria del mundo», de Alex Castro Soto del Valle.
Dedicada al Comandante en Jefe, la muestra fotográfica recrea a Fidel desde la mirada íntima del artista.
En medio de cuestionamientos e incomprensiones, en Cuba y en otras tierras el legado de Fidel se honra y celebra, con la misma fuerza con la que caló su palabra en el ser humano, en una historia que no permite el olvido.