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Han transcurrido más de dos décadas desde que la cienfueguera María Regla Eguizábal Álvarez rindió cuenta por primera vez como delegada del Poder Popular.
La noche de este 20 de septiembre de 2024, marca el inicio de un nuevo proceso de diálogo con el pueblo en Cuba y será en la circunscripción 10, del Consejo Popular de Centro Histórico, la demarcación que representa, la primera reunión de ese tipo en el municipio de Cienfuegos.
María Regla trabaja con el mismo espíritu y la convicción de siempre para salir adelante aunque reconoce que «este va a ser un proceso de retos para nosotros porque vamos a enfrentarnos a una situación atípica a otros procesos. Hemos tenido situaciones bien difíciles, pero las de este momento requieren de la ayuda y la unión completa entre la comunidad, las administraciones y nosotros como Consejo Popular»- precisó.
En un área ubicada en la Avenida 68 entre las Calles 31 y 33, acontecerá hoy la reunión de rendición de rendición de cuenta con el protagonismo de María Regla y sus electores. Esa zona es el corazón de Punta Cotica, «un barrio vulnerable que no ha entrado al programa de transformaciones pero que nosotros en la comunidad sí hemos transformado».
Entre los cambios notables, a decir de la también Presidenta del Consejo Popular, figuran «la eliminación de unos seis microvertederos que hemos convertido en pequeños parques y organopónicos, cuyas producciones se donan al sistema de atención a la familia y hogar de ancianos. Los artistas del proyecto «Razones» han construido estatuas en sitios donde antes existían desechos y la población trata de mantenerlas lo mejor posible»- refiere.
El apoyo de las entidades de la demarcación y la participación popular resultaron vitales además para que en Punta Cotica eliminaran obstrucciones, colocaran las tapas de los registros del alcantarillado.
Más allá de la actuación comunitaria, en la circunscripción 10 de Centro Histórico, como en las del resto del municipio, existen problemas que demandan la atención oportuna de las administraciones. En este caso no es preocupante la compleja situación del abasto de agua y sí la existencia de obstrucciones, asunto a resolver por Acueducto y Alcantarillados.
Para indagar por soluciones y como parte de su ejercicio de representación a la ciudadanía, María Regla participa cada jueves en un encuentro con las máximas autoridades de la provincia para el análisis de esos y otros temas. En una reciente evaluación, la presencia de Antonio Rodríguez Rodríguez, presidente del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, fue oportuna para debatir posibles alternativas acerca del suministro del líquido vital a los vecinos de la conocida como Loma de la Plaza, en la calle de Santa Cruz, donde hace más de 20 el abasto de agua es asunto crítico.
«En cuanto a Comunales tenemos que seguir trabajando con la comunidad en la erradicación de la indisciplina social, en el cumplimiento de los horarios para sacar la basura y en que no se pueden botar escombros. Es una fortaleza que diariamente nuestro Consejo Popular tiene recogida de desechos sólidos. En el caso de la vivienda hemos sido priorizados en la rehabilitaciones de cuarterías, la entrega de subsidios, por esa parte de la población se siente bien».
Sin embargo, María Regla conoce que cuando rinda cuenta en la primera reunión de este proceso, sus electores manifestarán preocupación con el complejísimo panorama energético, pues resulta «lo que la población intercambia mucho con nosotros. El sistema energético no con el tema de apagones sino con que haya una equidad a la hora del quitar la electricida en circuitos que son repetitivos y en otros no muy afectados. El tema del abasto de agua, en el que influyen los apagones y el tercer punto que preocupa a la población es el tema de la canasta básica».
María Regla, quien en su juventud fuese una destacada gimnasta y entrenadora, ya supera los sesenta años y los últimos 24 han sido de total dedicación al Poder Popular. Esta noche será para ella una nueva oportunidad de diálogo con sus electores en un espacio formal, que no resulta único porque conoce, escucha y atiende a cada hombre, mujer, niño o anciano del barrio que la enorgullece.
