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El 26 julio de 1953, día del asalto a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes, destaca como uno de los momentos más grande de la historia de Cuba, acontecimiento con un simbolismo y una fuerza que debe transitar por las venas de cada cubano, pues esa acción liderada por Fidel Castro abrió la senda hacia la definitiva independencia.
El hecho posee un valor inigualable porque lo protagonizaron jóvenes llenos de vida y coraje, con plena conciencia de la necesidad de lograr la libertad de Cuba.
Los disparos no fueron solo contra los soldados o las edificaciones militares, sino contra las injusticias, la miseria, el analfabetismo, la falta de derechos a la Educación y la Salud, el fraude electoral, los robos, secuestros y asesinatos que proliferaban en la etapa.
Nuestra Cuba actual está repleta de retos diferentes y, sin dudas, es el Moncada de los hombres y mujeres de hoy que nunca podrán claudicar, pues poseen conciencia de lo que significa evocar aquel momento y a sus héroes.
El espíritu del 26 de julio debe acompañarnos en cada momento como factor indispensable para seguir en el camino de la dignidad, incluso cuando el triunfo parezca difícil.
Esa decisión, esa fuerza y coraje casi míticos como pueblo, junto a la inteligencia y la unidad, harán posibles nuevos éxitos en favor del progreso y la vida, con fidelidad a la soberanía; con amor y respeto al himno, al escudo y a la bandera.
A 71 años de los gloriosos días del Moncada, Cuba toma la historia por asalto con la heroicidad y rebeldía de aquellos jóvenes. Acompañamos al Partido y a la dirección de gobierno en todas las tareas y misiones, con el apoyo incuestionable al presidente Miguel Díaz – Canel Bermúdez.
Vamos de la mano de la Revolución, esa que desafía conflictos y aislamientos provocados de antaño por una guerra fría y por el imperialismo norteamericano; una Revolución que enfrentó e impide agresiones de todo tipo.
El pueblo cubano enfrenta sin rendirse una situación adversa en la economía, la dureza de la vida cotidiana con las dificultades propias del desabastecimiento y los problemas energéticos.
Pero los cienfuegueros nunca le han fallado a la Revolución, – lo dijo Fidel en una de sus visitas a la Perla del Sur -, y hoy aseguramos que nuestros pasos serán más firmes, pues en esta provincia, al igual que en toda Cuba, cada día enalteceremos el valor histórico del 26 de julio de 1953. ASÍ PENSAMOS Y ASÍ LO HAREMOS.
