por 
Para la recuperación económica en el 2024, Cuba plantea aplicar una serie de medidas enfocadas en el cumplimiento de la producción de los bienes y servicios exportables, informó este lunes titular de Economía y Planificación, Alejandro Gil.
Durante el debate de la Comisión de la Asuntos Económicos de la Asamblea Nacional del Poder Popular (Parlamento), previo al segundo periodo de sesiones, en su X Legislatura, el también vice primer ministro de la República, detalló que el objetivo de estas iniciativas es avanzar en una autonomía real, recuperar los niveles de eficiencia de las principales actividades económicas y lograr su sostenible.
Explicó que para asegurar los ingresos de divisas al país trabajará en reordenar el sistema financiero, incorporar gradualmente a actores económicos estatales exportadores a vender parte de sus divisas al tipo de cambio del mercado cambiario, potenciar el comercio electrónico, e incentivar la compensación de importaciones con exportaciones.
Detalló que durante el 2024 las prioridades del Programa de Estabilización Macroeconómica estarán centradas, fundamentalmente, en la implementación de acciones dirigidas a la corrección de los precios, la gradual desdolarización de la economía, la reactivación del mercado cambiario y la transformación del mecanismo de gestión de la liquidez de divisas en el país.
Algunas de las medidas a destacar en este aspecto, están relacionadas con concretar la corrección de precios internos, reactivar el mercado cambiario y su papel en la economía y evaluar las exoneraciones fiscales y el impacto real que tienen en la economía para beneficio de la población y eliminar las que no se justifiquen.
Para avanzar en la recuperación de los niveles de la producción nacional de alimentos se prevé establecer un mecanismo financiero diferenciado para la producción nacional, avanzar en la entrega de tierras en usufructo, ampliar la utilización del pluriempleo y la contratación de estudiantes, así como lograr mayor participación de la producción nacional en la canasta familiar normada.
Entre las transformaciones contenidas en el Plan de la Economía del año 2024 para el sector empresarial se encuentran, promover, desde las entidades estatales, las relaciones con los actores no estatales, sobre la base del aprovechamiento de las capacidades productivas ociosas.
Además, se proyecta avanzar en la descentralización de estructuras empresariales estatales de subordinación nacional hacia los territorios, Además de la creación de Micro, Pequeñas y Medianas empresas estatales, así como perfeccionar el proceso de creación es estas en el sector privado.
El ministro apuntó que debe avanzarse, con mayor celeridad, en transformaciones esenciales encaminadas a modificar gradualmente los mecanismos de asignación de recursos y el esquema institucional en que operan las empresas estatales.
Adicionalmente, apuntó, se prevé que comiencen el próximo año operaciones comerciales varios negocios con inversión extranjera.
En función de los balances macroeconómicos proyectados y la dinámica inflacionaria de los últimos trimestres del 2023, subrayó que se estima un comportamiento para la inflación entre un 20 y u 25 porciento.
Igualmente, dijo que, para el venidero año, con los niveles de actividad proyectados en el plan, se planifica un crecimiento del PIB a precios constantes, en el entorno del dos por ciento.
Fotos: Vladimir Molina Espada (FotosPL)
Economía de Cuba cerrará el 2023 sin cumplir crecimiento proyectado
En los debates de la Comisión de Asuntos Económicos de la Asamblea Nacional del Poder Popular (Parlamento ), previos al segundo periodo ordinario de sesiones del órgano, en su X Legislatura, detalló que este pronóstico está relacionado con los impactos en la economía por las limitaciones en la disponibilidad de divisas y los combustibles.
Ante la presencia del presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, el titular de Economía adelantó que por el comportamiento mostrado en los últimos trimestres puede existir una contracción de entre uno y dos por ciento al cierre del año en curso.
Reiteró que el principal obstáculo para avanzar en el desarrollo del país continúa siendo el bloqueo impuesto por el Gobierno de Estados Unidos.
Gil detalló que la mayor de las Antillas espera que al cierre del 2023 el nivel de inflación ascienda al 30 por ciento.
Apuntó que en esta situación inciden el incremento de los precios internacionales, el déficit de fuerza trabajo agrícola, la contracción de las ofertas -principalmente estatales-, así como las especulación y elevados precios por encima de los costos y las ineficiencias de las medidas adoptadas para el control de los precios.
Sobre las exportaciones totales, dijo, que se estiman en nueve mil 70 millones de dólares, inferior a lo planificado en 770 millones.
Argumentó que con respecto al 2019, existe una brecha negativa que supera los tres mil millones de dólares, aunque, se aprecia una recuperación de algunos rubros exportables, como el tabaco y los productos de la pesca.
Igualmente, explicó que el turismo tiene una gradual recuperación, creciendo sus ingresos por exportaciones y se prevé cerrar el año con alrededor de dos millones 450 mil visitantes, que representa un crecimiento del 50 por ciento respecto al 2022.
En ese complejo escenario y aunque no fue posible abarcar todas las necesidades de la población, aseguró que el país realiza todos los esfuerzos para la entrega de los productos de la Canasta Familiar Normada, la generación de electricidad, los combustibles y otros recursos vitales.
Asimismo, la nación caribeña mantuvo la atención a familias en situación de vulnerabilidad, así como la atención integral a la niñez, adolescencia y juventudes.
Como paso positivo durante el año en curso se refirió a la diversificación del sistema empresarial, con más de dos mil 500 entidades estatales, enfocadas en la producción de alimentos, manufactura, programación informática, servicios profesionales, construcción, reparación y mantenimiento de maquinarias, equipos y medios de transporte, comercio exterior y producción de semillas.
Aunque, subrayó, aún queda por resolver el encadenamiento efectivo entre los sectores estatal y no estatal, pues la tendencia en la actualidad está en la importación de bienes finales y no de insumos para producir en la industria.
Recalcó que a partir del esfuerzo conjunto y la instrumentación de una serie de medidas se proyectan para el año 2024, crecimientos en niveles de actividad decisivos.
