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Con trabajos productivos para la siembra de caña y otros alimentos, matutinos en centros laborales e intercambio con combatientes del Levantamiento Popular Armado del 5 de Septiembre de 1957, en la provincia de Cienfuegos homenajean desde hoy a héroes y mártires de la efeméride.
Militantes de la Unión de Jóvenes Comunistas (UCJ) protagonizarán el tributo por el aniversario 66 del acontecimiento, que incluye el tradicional recorrido por las 11 tarjas relacionadas con la fecha, entre estas las ubicadas en la escuela de autismo Vilma Espín y en el parque de la barriada de Reina.
De igual forma, efectuarán un Barrio Debate donde las nuevas generaciones tendrán la oportunidad de acercarse a las vivencias de quienes participaron en la insurrección, al tiempo que se entregará el carnet a futuros integrantes de la UJC y cancelarán un sello conmemorativo en recordación de la epopeya.
La inauguración de nuevas obras, por ejemplo, los talleres de los Artistas y de la Crítica, y el desarrollo de la cantata Volver a Vivir en el emblemático Teatro Tomás Terry también forman parte del cronograma diseñado para rememorar el hecho histórico.
El propio día 5 se realizarán matutinos especiales en el Museo Naval, el Gobierno provincial y el antiguo colegio San Lorenzo ─hoy Escuela Secundaria Básica Urbana 5 de Septiembre─, principales escenarios del encuentro armado, así como el acto central en el parque José Martí, seguido de la tradicional peregrinación del pueblo centrosureño hasta el Cementerio Tomás Acea, donde reposan los restos de los caídos en combate.
En septiembre de 1957 un grupo de jóvenes integrantes del Movimiento 26 de Julio y algunos miembros de la Marina de Guerra, simpatizantes de la gesta revolucionaria, tomaron las armas contra la dictadura de Fulgencio Batista, con el propósito de liberar la ciudad y abrir un frente de lucha en el centro del país, en apoyo a la campaña del Ejército Rebelde en la Sierra Maestra.
Aunque el objetivo principal no se cumplió porque las tropas enemigas enviaron refuerzo aéreo y terrestre, los jóvenes liderados por el hoy Comandante del Ejército Rebelde Julio Camacho Aguilera y el marino Dionisio San Román demostraron la debilidad de las fuerzas armadas de la tiranía batistiana.
