El próximo jueves, desde el Hospital provincial Faustino Pérez, de Matanzas, serán trasladados los restos óseos del miliciano Máximo Ramón Jaureguí Díaz, combatiente desaparecido durante la invasión mercenaria de Estados Unidos a Cuba en 1961, hasta el Museo Girón y luego de un homenaje póstumo, viajarán a Cienfuegos acompañados por familiares, dirigentes políticos e integrantes de la Asociación de Combatientes de la Revolución cubana.
Con la confirmación, en diciembre pasado, mediante prueba de ADN efectuada a esos restos de Jaureguí Díaz, el equipo del Servicio provincial de Medicina legal, de Matanzas, concluyó las investigaciones forenses que comenzaron desde el año 2019 cuando una brigada de constructores halló los restos humanos en el terreno del Hotel Girón.

El Licenciado Yoel Monzón González, Jefe del equipo de trabajo de Antropología forense (ETAF) del Servicio de Medicina legal, en la tierra yumurina, explicó en conferencia de prensa que, “el 28 de diciembre del 2022, tuvimos la noticia del Laboratorio de Genética criminalística de que los restos óseos y las piezas dentales que mandamos a cotejar por perfil genético, había dado positivo por la línea paterna Jaureguí”.



Según las pruebas forenses, Ramón Jaureguí no pasaba los 20 años de edad cuando fue a Girón en el Batallón 339 junto a sus cuatro hermanos. “Los restos aparecieron envueltos en un nyon verde, de los que usaron los mercenarios para envolver a los fallecidos”, amplió el investigador y “con la aplicación de varias técnicas forenses, la entrevista a la familia actual y la constante comparación de resultados, la hipótesis era más cercana a la conclusión positiva”.




En el cementerio Tomás Acea sucederá la despedida de Ramón Jaureguí Díaz, en la tarde del jueves y el viernes tendrá lugar la inhumación de sus restos en el panteón de los Mártires de Playa Girón.