El quemador número cinco de la marca Hitachi, reconstruido recientemente en su totalidad por un equipo de trabajadores de la termoeléctrica de Cienfuegos, funciona con eficiencia, luego de más de un mes de su puesta en marcha.
Este equipamiento – cuya reconstrucción evitó la compra de uno similar y por ende ahorró más de medio millón de dólares a Cuba-, fue instalado poco antes del arranque de la caldera de la unidad cuatro, el pasado 15 de mayo, cuando la planta pudo sincronizar al Sistema Eléctrico Nacional, luego de 81 días de mantenimiento.
José Osvaldo González Rodríguez, director de la “Carlos Manuel de Céspedes”, declaró a la Agencia Cubana de Noticias que siempre estuvieron muy seguros del resultado de la innovación, y sabían que el equipo funcionaría bien, porque se emplearon materiales idóneos y fueron muy rigurosos en su reconstrucción.
La caldera lleva nueve quemadores- dijo- y con el aprendizaje logrado en las faenas de reparación capital del número cinco, pudieron dar mantenimiento a los ocho restantes, los cuales no estaban en tan malas condiciones.
Juan Bravo Núñez, director técnico de la termoeléctrica, agregó que la recuperación de ese aparato ha sido un éxito, ello fue una de las razones para poder alcanzar la capacidad nominal de generación de esa unidad, ascendente a 158 megawatt.
Constituye una labor encomiable -resumió- porque las acciones de quienes acometieron esa misión fueron más allá de hacer ingeniería inversa, ya que no se contaba con planos, ni ningún otro referente.
Ellos tuvieron que poner todo el ingenio para enfrentar lo nuevo, por eso considero es ahí donde está el arte y la ciencia, y la voluntad de hacer bien las cosas, aseveró el directivo.
Desde el 2017 ese equipamiento había permanecido averiado en la generadora cienfueguera, a la espera indefinida porque era muy elevado su costo en el mercado.
Ese dispositivo tiene gran importancia para la caldera porque al estar ubicado en el centro de ésta, permite regular la estabilidad de la carga térmica del horno.