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Por: Danley Díaz Rivera
Se llama contaminación sonora, acústica o auditiva a la presencia de ruidos molestos, ensordecedores o contantes, así como a la proliferación simultánea de ruidos excesivos en un área determinada, que afecta de manera negativa la calidad de vida de los seres humanos y los animales. En nuestros pueblos y ciudades se requiere de vez en cuando alzar la voz, pero para pedir un poco de silencio.
